sábado, 5 de abril de 2014

El despertar.



El despertar.

Cuando al amanecer busco a mi lado
la emoción de encontrarte
y hallarme con tu cuerpo deseado
y tropiezo tu mano, aún dormida,
la ilusión de buscarte
y de hallarte de nuevo renacida
quiero volver a verte, enamorada,
con tu vestido blanco
y de flores de acacia coronada
porque casarte quiero, novia mía,
y renovar mi amor
con otro amor creciente cada día.

La luz del alba rompe en la persiana
y se anuncia inminente,
con un canto de mirlos, la mañana.
Yo acaricio tu pelo y voy besando
tus ojos y tus manos
recorriendo tu cuerpo, caminando
tu piel en caricias caprichosas;
mientras, tú te despiertas,
descubres el contorno de las cosas
y me ofreces enamoradamente tu hermosura,
mirándome a los ojos,
en una entrega plena de ternura.

¿Eres mujer o niña, o palpitante
pájaro que se estremece
con la caricia viva de tu amante?.
Niña o mujer, paloma prisionera,
en este amor primero
de la mañana cierta yo quisiera
retener tu presencia así sentida
y fundirme en tu cuerpo
paralizando el curso de mi vida.


4 comentarios:

Verónica Calvo dijo...

Hola querido Fernando.
Este poema se renueva a sí mismo, como el mismo amor que versas.

Despertar, contemplar a la persona amada, y sentir la plenitud de los primeros días, intacta.

Abrazos

Fernando dijo...

Eres mi única lectira (y mi preferida) Gracias por tu comentario. Un saludo muy cordial.

Gustavo Figueroa Velásquez dijo...


Querido Fernando:

¡Dichosa ella, la musa de tus versos, escritos con esmero y el cuidadoso juicio de la rima!
¡Cuánto amor, cuánto amor en el corazón de un enamorado!
No se ama de verdad, si con el paso del tiempo, no se es capaz de reinventarse en el amor.
Amigo, Poeta, te dejo un gran abrazo y mi admiración.
PD. Tengo tus poemas en mi ordenador y, antes de acostarme, escucho uno y me voy a la cama con la felicidad de haberte conocido.

Fernando dijo...

Siempre recuerdo tu últimas visita, caballero colombiano, profundizando nuestra historia española, con tu alta categoría intelectuak y humana. Un abrazo siempre produndo de tu amigo Fernando.