viernes, 11 de abril de 2014

Amigos, dejo de volar.



Queridos amigos. Esta es mi última entrada en el blog de poesía. Estoy cansado y dejo de volar. Gracias por haberos comunicado conmigo. Siempre os recordaré con emoción. Un saludo fraternal. Fernando.

8 comentarios:

Antorelo dijo...

Lo lamento, amigo. Mucha salud y bienestar para ti y los tuyos.
Un fuerte abrazo.

JUAN PAN GARCÍA dijo...

Te entiendo, amigo; los años pesan, yo estoy también tocado. Mucha salud y tranquilidad. Un abrazo

Gustavo Figueroa Velásquez dijo...

Querido Fernando:

Todo en la vida tiene su ciclo y uno va hasta donde puede; durante todo este tiempo de buena poesía en tu blog he disfrutado, llegando a la admiración, de tu obra y, de alguna maravillosa manera, creo que la poesía nos tendió el puente que nos permitió encontrarnos y estrechar una amistad que me honra. Haberte conocido personalmente en tu tierra ha sido uno de esos grandes momentos en la historia de mi vida.
Gracias Fernando por todo lo que nos has dado a través de tu blog. Gracias Poeta por la calidad y hermosura de tus versos y, por sobre todo, gracias por tu inmensa calidad humana.
Cuídate mucho y recibe mi más cálido abrazo.

Anónimo dijo...

Pues, apreciado Fernando, va a resultar que soy un necio; y debo serlo, solamente por ser la única voz discrepante, entre todos los comentarios leídos, y tu decisión.

No es la primera vez que amenazas con dejar de escribir,incluso algunas veces hasta lo intentaste, pero eso es imposible, llevas la poesía prendida en el alma y no te queda más remedio que seguir ilusionando a todos los lectores y a esa masa de discípulos que te siguen.
No, yo no te voy a pedir que sigas, yo te lo voy a exigir, en ello va tu salud, Fernando, sin poesía no eres nadie, tu te alimentas del aliento poético, sin el no puedes vivir; por favor, no te suicides.
Con cariño, Terrón de tierra

Unknown dijo...

Lo siento. Una decisión importante.
Un abrazo

Verónica Calvo dijo...

Querido Fernando... no dejarás de volar ni de escribir, porque las letras son tu sangre, aunque queden para ti, en tus momentos.

Por mi parte: no pienso perder el contacto contigo. Tengo tus maravillosos libros y los leeré, como vengo haciendo puntualmente.

Respetando tu decisión, solo me queda decir: gracias!!!

Un abrazo enorme

Juanjo Almeda dijo...

Hola, Fernando:

Aún recuerdo el día que te conocí a través de mi blog, algo que nunca olvidaré. Tu amistad y tu compañía, aunque desde la distancia, han sido y siguen siendo importantes para mí. Tu poesía y tu persona me han enseñado muchas cosas; ahora, me cabe esperar que lo sigan haciendo de alguna manera. Yo sé que en la medida de lo posible no dejarás de escribir.

Un abrazo de un amigo que te aprecia, querido poeta.

Emilio Porta dijo...

La palabra escrita es el camino elegido por nosotros para permanecer, Fernando. Tengo tus libros y tu memoria. Tengo el recuerdo de algunos buenos encuentros. Sé que la vida es como es y tiene sus límites. Pero yo creo que un escritor deja de escribir cuando deja de respirar. Cierto es que no podemos, como lectores, atender a cada instante... porque este mundo nos pone a cada uno nuestras barreras e impone sus cargas.
Fernando: si uno sabe volar, solo deja de volar cuando se marcha. Todos lo haremos alguna vez. Pero mientras estés aquí no vas a dejar de trazar líneas con la palabra escrita. Porque es tu modo de ser. Sobre la importancia de cada uno... siempre creo que la frase del ajedrecista es la única verdad: "Al final de la partida, el rey y el peón vuelven al mismo cajón". Solo que tú has sido rey en muchos instantes. Porque eres un gran poeta. Porque la gestión no es la escritura, ni la creación. Y si este mundo es de los gestores... algo anda mal en él. Tu obra es tu vida. Y es magnífica. Por calidad literaria y por calidad humana.
Un abrazo de este amigo que no siempre pudo o supo poner tus libros en lo más alto... pero es que, como decía Elena Poniatowska en su discurso del Cervantes: "Todos somos venidos a menos y en reconocerlo está nuestra fuerza". Ojalá tu corazón y tu mente aguanten mucho tiempo. Porque somos muchos los que te valoramos y apreciamos. Un abrazo, Fernando.