¿Es verdad que después de nuestra muerte
somos ángeles, somos inmortales,
que exploramos espacios siderales
abandonando nuestra carne inerte?
¿Es verdad que no podré retenerte
nunca más en mis brazos, que tus males
nunca más en mis brazos, que tus males
sí eran verdaderos y mortales,
que ya nunca podré volver a verte?
Ven hacia mí, que quiero estar contigo,
estar muy cerca para ser testigo
de que sigues viviendo, hablarte
de nosotros, decirte lo preciosas
que son tus leves manos y encontrarte
presente y viva en todas nuestras cosas.
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17 comentarios:
como siempre nos deleitas con un hermoso recuerdo en un soneto.
besos
Marina
Es tan difícil el soneto, que admira doblemente tu poema: por un lado, hay que señalar la perfección técnica, pero por otro, está el fondo,las preguntas esenciales, el anhelo expresado con una finura de sentimientos conmovedora.
Tus sonetos son admirables, ciertamente, como dice Rosa Cáceres.
En éste defines como yo en uno de mis poemas "La indefinible dependencia de la carne", la necesidad de sentir la piel, el abrazo, el beso y el calor de quien amamos.
Un abrazo
Vine llego a traves de Marina y no te dejo me encantan tus textos
No sé si es verdad...
La única verdad es que tu soneto está lleno de ternura.
Y la foto que lo acompaña es deliciosa.
Gracias por recomendarme la música de Mompou. Esta tarde me pondré en su búsqueda.
Besos,Fernando!
Dificil de saber.
Muy bueno.
estimado poeta, he entrado y he leído,
felicidades por tus sonetos.
Un saludo
Hola Fernando:
Hemos creado una página para centralizar todo lo referente al "I Encuentro de Poesía en la Red"; el enlace lo tienes en el perfil de este mensaje o en: http://encuentropoesiaenred.blogspot.com
Si quieres puedes enlazarlo en tu página.
Aprovecho para invitar a cuantos lean este mensaje para que se unan al encuentro que tendrá lugar el día 26 de Septiembre en los locales del Café Gijón situados en el Paseo de Recoletos, 21 de Madrid. Será necesario inscribirse en la página arriba señalada por cuestiones previas de organización.
Agradecemos tu asistencia.
Un fuerte abrazo.
Emilio.
ES LA PREGUNTA SIN RESPUESTA, EL DESVALIDO BOSTEZO HUMANO QUE IRRUMPE EN SOLEDAD...
LAS CRIATURAS IMAGINARIAS DE NUESTRA MENTE, QUE QUIEREN SER ENCENDIDAS, PARA LUEGO ACTUAR Y SUSURRARTE LA RESPUESTA; LA MAREA EFIMERA.
CUIDATE, PRECIOSO.
Fernando, qué suerte haber encontrado tu blog. Creo que estás bendecido por el don de la poesía.
Magnífico. Es un placer leerte.
¡Cuánto duele la ausencia!
La soledad
se hace efímera
cuando no habita
el olvido.
Magistral, como siempre querido amigo.
Un abrazo
Lo que hay detrás de la muerte...quizá sea lo mismo que tenemos delante. Hay que vivirlo con intensidad, y... no dejar al olvido llegar a hacer estragos en la memoria.
Muy intenso este poema, muy cálido, muy triste también...como lo es la separación.
Besos
Quién sabe lo que ocurre después; mientras tanto, como bien dices, dejemos fluir nuestros sentimientos y hagamos del presente el unico momento que tenemos. Me has transmitido mucha emoción, un saludo.
¿Quién sabe lo que hay después?
Otro emocionante soneto salido de las manos de un poeta.
Abrazos.
Sin palabras.....
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