Caminar y caminar sin un proyecto, no ver nunca la luz, esquivar las sombras, mientras los árboles te miran, inánimes; quizás un débil temblor, un estremecimiento, algún sonido, pero siempre la soledad y el silencio.
Desde este frondoso bosque por el que paseo, agradezco ese débil temblor, ese estremecimiento ante el sonido que tus letras dejan tras de sí. Un abrazo
"Pero siempre la soledad y el silencio..." Qué hermosura de versos¡ Siempre nos acercas a la madre naturaleza con tu bucólica y maravillosa poesía o prosa... Un placer leerle. Abrazos en la noche. Carmendy
La soledad y el siencio me parecen imprescindibles para conseguir ver la luz: la interior que nos ayuda a ser más nosotros mismos, y la que viene de fuera que a veces hiere y otras nutre.
Pero, por muy bello que resulte caminar por el bosque, por muy necesario que sea saber estar con uno mismo, oídos y boca cerrados, si no pudiera hacer otra cosa que esquivar sombras y toda claridad me estuviera vedada, el camino me resultaría impracticable.
¡Ya era hora poeta!, Un abrazo y no pares de escribir. Á.
Angeles, amiga escritora, gracias por tus ánimos. Cuando atravieso el bosque es que mi intención es encontrar la luz, pero ¡caray!, ¡cómo se esconde entre tanto árbol!. Bueno, viviremos entretanto en la esperanza. Después del último relato, que estoy pesando en llamar "la ausencia" me dedicaré a fondo a mis poemas para acabar el libro "Densidades". Un saludo cordial.
16 comentarios:
Caminar por el bosque es una experiencia espiritual que nos acerca al centro del propio conocimiento. Escueto pero profundo poema.
Un saludo
No acerca, pero siempre queda la soledad y el silencio n abrazo y gracias por tu comentario, María Teresa.
Desde este frondoso bosque por el que paseo, agradezco ese débil temblor, ese estremecimiento ante el sonido que tus letras dejan tras de sí.
Un abrazo
Un saludo, Carmen, amiga. Y un cordial recuerdo de nuestro encuentro en Alcalá de Henares.
Dulce y fresca sensación
paseando entre los
árboles.
Un abrazo
"Pero siempre la soledad y el silencio..."
Qué hermosura de versos¡
Siempre nos acercas a la madre naturaleza con tu bucólica y maravillosa poesía o prosa...
Un placer leerle.
Abrazos en la noche.
Carmendy
Hola, Carmendy, Mi problema es casi siempre no ver la luz Un abrazo,
Marisa, amiga. El bosque es bonito, pero no nos acerca a la luz como quisiéramos. Gracias por tu comentario,
El bosque, misterioso en su silencio, y siempre hospitalario.
Un abrazo.
agrando
el silencio
con mi
silencio
besos,maestro*
Un beso en silencio, querida Rayuela, y un fuerte y cariñoso abrazo.
Hola, Jorge: el bosque es hospitalario, pror nos deja meditar demasiado. Un fuerte abrazo.
Un poema que se siente triste...
Por no encontrar el espacio, Carla. Un abrazo.
La soledad y el siencio me parecen imprescindibles para conseguir ver la luz: la interior que nos ayuda a ser más nosotros mismos, y la que viene de fuera que a veces hiere y otras nutre.
Pero, por muy bello que resulte caminar por el bosque, por muy necesario que sea saber estar con uno mismo, oídos y boca cerrados, si no pudiera hacer otra cosa que esquivar sombras y toda claridad me estuviera vedada, el camino me resultaría impracticable.
¡Ya era hora poeta!, Un abrazo y no pares de escribir. Á.
Angeles, amiga escritora, gracias por tus ánimos. Cuando atravieso el bosque es que mi intención es encontrar la luz, pero ¡caray!, ¡cómo se esconde entre tanto árbol!. Bueno, viviremos entretanto en la esperanza. Después del último relato, que estoy pesando en llamar "la ausencia" me dedicaré a fondo a mis poemas para acabar el libro "Densidades". Un saludo cordial.
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