martes, 6 de enero de 2015

Amar, vivir, conocer, sentir, pensar.




Nuestro amor incierto en modo infinitivo
(Amar, vivir, conocer, sentir, pensar)

Haber amado, eso es lo importante;
desde la hondura de nuestro ser
nos hemos amado sin límites,
olvidando normas y fronteras,
viviendo el delirio soñado,
unidos en un acto de profundo amor,
un éxtasis
que nos ha hecho conocer nuestra plena felicidad
nunca antes alcanzada
y ahora evanescente.

Haber vivido nuestro amor,
avivar nuestros sentidos,
descubrirnos,
ofrecernos la emoción de conocernos
pero amarnos siempre en modo infinitivo
con el riesgo
de olvidar, cambiar, desertar,
y no encontrarnos más en nuestro futuro.

Haber conocido el amor plenario
y saber que podemos perderlo;
sentir la inquietud
de incumplir las promesas
y traicionar la  esperanza
en el crepúsculo de nuestro pensamiento
cuando creemos que todo está preterido
y ya nada puede renacer en nuestra alma.

Haber sentido
la abrasión de nuestra piel
en la efusión de nuestras caricias;
comprometernos,
querernos con pasión
solo pensando en el otro para olvidar lo subjetivo
y darnos con calor el abrazo
de nuestros deseos compartidos y diluidos
en este amor incierto revelado.

No haber pensado
en el fin de nuestro encuentro,
creer que nuestro amor era infinito,
desconocer los tiempos y las fuerzas
y encontrarnos con el final,
nunca previsto,
de este nuestro ahora evanescente
y cada vez más deseado
amor incierto.                        


2 comentarios:

Marcos Callau dijo...

Qué poema más interesante, amigo Fernando. Gracias por estos regalos que nos brindas. Abrazos y feliz e inmejorable 2015

Fernando dijo...

Feliz Aolo,Marcos, Un brindis con las canciones de Sinatra. /Un fuerte abeazo.