jueves, 11 de octubre de 2012

Diez poemas sobre el amor incierto IV


IV

La explosión de las tendencias


Cuando me despierto
en la penumbra
y acierto a distinguir las líneas de su cuerpo,
luminiscente, terso,
y miro dócilmente la armonía de su diseño
nacido de la luz,
antes imaginado,
ansío
activar nuestros instantes
en una desmesurada invasión de nuestro tiempo.

Existen razones
que me unen a su grandeza
desde mi frágil equilibrio:
la generosidad nacida de un ser superior
y la adhesión sin condiciones de mi amor incierto,
extraído de la hondura de mis edades
y desde siempre escrito
en el tejuelo de mi libro vital.

La marea se convirtió en una tormenta,
las olas rompieron la estructura del puente
anegando las razones y los principios,
produciéndose la explosión de los sentidos
en una amalgama de amor y de pasión
que el timón no pudo superar.

¿Por qué resistir la fuerza de las olas?

La invasión de las nuevas ideas nos renace,
crea una nueva manera de amar,
sustituye las antiguas sensibilidades
por una explosión de los sentidos
que nos lleva, finalmente,
a los pies del ser superior
en un desmayo de querencias y voluntades.

Ya no hay penumbra.
Brilla la entrega nunca imaginada,
la percepción de la derrota de la angustia
y la victoria de la realidad,
esplendorosa y vital,
íntima y personal,
en la búsqueda de un nuevo viaje
hacia la conquista del amor incierto.


2 comentarios:

Francisca Quintana Vega dijo...

Desmenuzada cada sensación, para convertirla en palabras, en versos.
La esencia del sentir.Todo profundidad este poema. Mi cordial saludo.
Se dejan muy mal los comentarios...la moderación que tiene el blog tiene unas letras muy difíciles de ver y a veces me voy porque no consigo comentar.

Fernando dijo...

Cuabto lo siento, amiga Francisca. No puedo hacer nada para ayudarte. A mí me pasa lo mismo y a veces dejo de comentar. Gracias por leerme. Recibe un cariñoso salido.